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El 2025 tendrá como elemento saliente las contiendas electorales tanto provincial como nacional. En Misiones, las diferencias son muy marcadas entre la Renovación que despliega a lo largo de todo el territorio provincial una gestión incansable y, la oposición, que aún sufre el devastador efecto del caso Kiczka, que sacudió el tablero político de la Tierra Colorada y conmocionó a todo el país. A nivel nacional, por si fuera poco, la batalla librada entre el PRO y LLA, deja al partido liderado por Macri con serios problemas internos.

(*) Por Nicolás Marchiori

Los medios de comunicación constituyen desde hace tiempo el universo simbólico en el que pensamos, actuamos y sentimos. Todo pasa por allí, desde las ideas hasta los estilos de vida, desde la acción política y el ocio, hasta la educación.

Uno de los elementos destacados de la cultura mediática en la era de la revolución digital es la publicidad, cuyo peso en los hábitos, en la consolidación de creencias y el reforzamiento de conductas, va más allá de la compra de productos determinados.

Dicho esto, la dificultad para cambiar una mala imagen o para instalar algo desconocido, se encuentra en competir con el diluvio informativo, porque vivimos sobresaturados de palabras vacías, ruidos e imágenes que nos llegan por todas partes.

La saturación de mensajes generan una gran desatención, una permanente distracción que impide que podamos escuchar realmente y priorizar contenidos. Nos vamos acostumbrando a oír palabras que no nos dicen nada, palabras vacías. Asistimos a un mundo lleno de monólogos que entretienen y que sólo dejan información irrelevante, sin conexión con las dimensiones más profundas de la vida humana y que, además, la mayoría de las veces es falsa y sólo persigue como fin promover el odio, la desesperanza y la desafección.

La invasión de información excesiva abruma a las personas y la fugacidad de las noticias hace muy difícil una auténtica y profunda reflexión sobre temas complejos que tienen a simplificarse para sean fácilmente digeridos por una masa acrítica.

   (BBL)

En un mundo donde todo se ve en pantallas, la realidad ya no interesa, sino lo que se percibe, no importan los hechos, sino lo que se muestra. Esto es lo que se conoce como “posverdad”. La crisis de conocimiento de lo real, reducido a sus apariencias, es uno de los grandes desafíos de este tiempo.

En la Era de la Modernidad Líquida, la promesa y la lealtad necesitan de una genuina vivencia del tiempo. La mentalidad del “corto plazo” conspira contra la esperanza, es por ello que autores como Zygmunt Bauman y Byung – Chul Han, invitan a pensar en un horizonte que amplíe el presentismo en el que solemos vivir. Eso exige, inexorablemente, no dejarse arrastrar por el diluvio informativo, sino elegir cómo queremos vivir. Porque pensar en profundidad requiere del silencio y del paso del tiempo. Eso no puede acelerarse.

La crisis de temporalidad también afecta el modo de relacionarnos con los demás, la responsabilidad ante el otro, el compromiso y la entrega necesitan de la duración. La calidad de nuestras relaciones también puede ser un simple intercambio de informaciones y estímulos fugaces, o verdaderos vínculos profundos que echen raíces con el tiempo y nos arranquen del aislamiento y la superficialidad.

A decir de San Agustín, “la paciencia es compañera de la sabiduría y amiga de la buena conciencia”. Quienes no se dejan arrollar por la lógica de la inmediatez, sino que echan raíces en las cosas esenciales de la vida, en lo que realmente nos hace más humanos y mejores personas, pueden ser un oasis de paz y esperanza para tantos que corren sin saber hacia dónde van.

La época de grandes transformaciones que nos toca vivir puede generar una tendencia pesimista o excesivamente apocalíptica para algunos, pero, al mismo tiempo, puede parecer deslumbrante y llena de promesas para los más optimistas. Recuperar la virtud de la paciencia es una de las claves para redescubrir la fortaleza interior de que sabe esperar y construir una vida con sentido.

-El poder arrollador de la gestión 24/7

El ritmo de la gestión del gobierno de la Renovación en plena época estival, deja un mensaje nítido para la sociedad misionera: quienes profesan y practican la buena política “no se toman vacaciones”.

Tiempo atrás, cuando estaba al frente del Ejecutivo provincial, Herrera Ahuad expresaba que el Frente Renovador de la Concordia tiene una visión de provincia y de un esquema cultural que no está pensando en las elecciones. Trasciende a nosotros. Va mucho más allá. Por eso, en este tiempo de gestión la política no tiene que ser la excusa para nuestro trabajo y nuestra gestión. Al contrario, nuestro trabajo nos debe conducir inexorablemente a un objetivo que después redunda en un hecho político”, en alusión a los valores y principios rectores que inculca el conductor del espacio político, Carlos Rovira.

La historia nos muestra que, en tiempo complejo, el gobierno provincial ha tomado decisiones ejemplares, poniendo en alto las demandas de los misioneros y atendiendo las demandas de cada momento, lo que permitió orientar el rumbo de la política y la gestión hacia un norte definido que trasciende a la persona de cada uno.

 (Plan B)

La actualidad no es una excepción, gracias a las inversiones y la capacitación llevada adelante, Misiones atraviesa una temporada de extrema sequía, conteniendo de manera exitosa los focos de incendio que se multiplican en el territorio provincial. La creación de un sistema robusto para este tipo de contingencias, equipado con tres helicópteros nuevos, las herramientas de los bomberos, con personal altamente capacitado y los hidrantes, forman parte de este plan impulsado desde hace décadas en la Provincia y que ahora deja los resultados a la vista.

En el plano energético, la temporada de verano siempre pone a prueba la eficiencia del sistema. En este sentido, Misiones no tuvo cortes en el pico de consumo producto de las inversiones estratégicas llevadas adelante por el gobierno provincial. La semana pasada arribó a Garupá un nuevo transformador, el único que se vendió en Argentina en el último tiempo, adquirido con fondos propios.

Con esta inversión se proyecta un crecimiento del 30% de la potencia y se suma a los nuevos paneles solares de Posadas que ya permiten abastecer a un sector importante de la ciudad capital.

Este “masterplan” que viene ejecutando la Provincia en materia energética, en 3 años permitirá a Misiones contar con casi la misma potencia que una represa de Urugua-í en paneles solares. De esta forma, las energías limpias potenciarán el sistema, el desarrollo productivo y la economía de la Tierra Colorada.

 

En épocas donde la posverdad intenta imponer falsas realidades en la sociedad, la hiperactividad y la constante búsqueda de soluciones para los misioneros impulsada desde el gobierno, impone un cambio de paradigma en las estructuras y dinámicas de la política que generan incomodidades en gran parte del arco opositor que debe salir de su zona de confort en donde proliferan los discursos vacíos y la búsqueda permanente excusas.

    (Revista Noticias)

-Los fantasmas de una oposición perdida en el laberinto

Los efectos residuales del Caso Kiczka, aún permanecen en la alianza opositora que lo llevó a la banca de diputado. El aberrante hecho vinculado a la pedofilia que salpicó a las filas de Juntos por el Cambio en Misiones, agotó el capital político de varias figuras y condenó al ostracismo a quien encarnaba las trasnochadas aspiraciones de un revival de los 90’. El heredero siguió la suerte de su progenitor: la gélida experiencia de la muerte política. Queda claro que no hay artilúgio ni maniobra alguna capaz de limpiar la imagen de alguien que ha estado íntimamente vinculado con quien a esta altura, sin temor a equivocarnos, es la peor lacra que ha dado la política provincial en toda su historia.

Las creencias, la fe, la esperanza y la imaginación, juegan un buen partido a la hora de dilucidar temas como la muerte y la resurrección.

El más antiguo de los libros, la Biblia, nos habla de la resurrección, especialmente en el Nuevo Testamento. Pero en el Antiguo Testamento, Génesis 3:19, Dios le advierte a Adán: “polvo eres y al polvo volverás”.

El humano sufre su condición perecedera, teme a la muerte, a la nada o al olvido que seremos” del poema de Jorge Luis Borges. Desear la vida eterna no es lo mismo que tenerla. Lo mismo sucede en la política, la realidad es incuestionable y no se puede manipular. Frente a esto, aventurarse con la idea de la resurrección se reduce sólo a un deseo.

La construcción de una falsa legitimidad por parte de un sector de la oposición, que se posaba sobre un pedestal de superioridad moral, pareció darle excelentes réditos políticos hasta el cimbronazo generado por el caso que involucra al principal socio político y mano derecha de Pedro Puerta. Hablamos del ex diputado Germán Kiczka que fue expulsado de la Cámara de Representantes. Traducido de la política a la calle: el caso Kiczka dinamitó la imagen pública de la oposición y decretó la muerte política de quien se aventuraba con la posibilidad de conducir los destinos de la provincia en 2027.

Si bien en las últimas horas se conoció la elevación a juicio de la causa de pedofilia que mantuvo en vilo a toda la provincia durante 2024, hecho que deja a los hermanos Kiczka en la puerta del juzgamiento, los involucrados ya tienen sobre sus espaldas el peso de la mayor de las condenas: la social. Una condena social que se extiende a quienes la gente cree que fueron cómplices de tales aberraciones, por más de que ahora busquen desesperadamente diferenciarse y hacerse los desentendidos.

Sumado a esta situación, el calamitoso presente de la principal alianza opositora en Misiones, vive con desconcierto el enfrentamiento que se da a nivel nacional entre Mauricio Macri y Javier Milei. Esta situación los está debilitando y aviva aún más las internas.

El nivel de fragmentación es tan grande que pone en jaque las intenciones de cada vez más pocos dirigentes que buscan presentarse juntos a las elecciones. Los egos, la puja por espacios de poder y la desconexión de la realidad, amenaza seriamente la supervivencia de un espacio que vuelve a cometer los errores de siempre y sigue sin aportar una verdadera propuesta seria y superadora para la sociedad, sólo se dedica a criticar y a poner palos en la rueda.

En este contexto, sobresale la Renovación como la apuesta política más importante para los misioneros que ven un espacio activo, que gestiona y se abre sin prejuicios a las demandas de la sociedad y a los cambios políticos de cada tiempo. Los que no entienden el nuevo tiempo son expulsados a los márgenes y quedan condenados al ostracismo.

(*) Abogado. Diplomado en Manejo de Crisis y en Análisis de Procesos Electorales. Especializado en Comunicación de Gobierno y Electoral. Becario de la Fundación Konrad Adenauer (Alemania) y del Centro de Análisis y Entrenamiento Político (Colombia).

RMM

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