Enmarcado en la frescura del monte y de la yerba mate que crece vigorosa asociada a otros árboles y con un suelo fértil totalmente cubierto, Luis Héctor Díaz Espeche recibió el pasado viernes 5 de abril, de manos de los directores por la Producción en el INYM, Nelson Dalcolmo y Claudio Marcelo Hacklander, la placa homenaje como “Buen Productor Yerbatero 2023”.
En la chacra ubicada en Colonia Primavera, a unos 10 kilómetros de la ciudad de San Pedro, la familia Díaz Espeche trabaja desde el año 2020 con técnicas orientadas a lograr una mayor productividad en equilibrio con la naturaleza, inicialmente con el PATEPY (INYM – INTA) y luego, desde noviembre del 2020 hasta la actualidad, con el acompañamiento del Servicio de Extensión Yerbatero (SEY) del INYM. Los resultados son alentadores.
Sobre un total de 27 hectáreas, 5 son de yerba mate desde 8 años atrás, donde se trabaja con manejo de planta, control de la fertilización y cubiertas verdes y 3 has, son de yerba mate plantadas hace 3 años en curvas a nivel, con subsolado, plantines de genética mejorada, manejo de cubiertas verdes con motoguadaña, incorporación de árboles nativos y manejo de plantas pioneras como el “fumo bravo”, destinadas exclusivamente a proveer el mercado de yerba orgánica junto a un grupo de agricultores de la zona. El resto de la superficie de la chacra es de bosque nativo con curso de agua.
El productor “fue seleccionado entre varios propuestos por los técnicos que integran el SEY, cumpliendo ampliamente con los objetivos y lineamientos determinados para la entrega de la mención”, explicó el ing. Matías Bazila, jefe del servicio técnico del INYM. “Hemos observado una evolución en las prácticas y conocimientos implementados y un cambio positivo en toda la chacra, es decir optó por mejorar todo el yerbal y hacer una inversión en tiempo y costos a mediano y largo plazo, con resultados que están a la vista”, agregó.
En el año 2020, el rendimiento total obtenido era de 12.950 kilogramos de hoja verde en las 5 hectáreas (2.590 kilos de hoja verde por hectárea). Entonces, el manejo del yerbal era realizado en forma tradicional con herbicida y macheteo, encontrándose gran parte del año el suelo descubierto. La cosecha no contaba con los criterios para el cuidado de las plantas. En tanto, en el año 2022, después de las intervenciones del productor con el acompañamiento del INYM, el total de kilogramos cosechados en esa misma superficie fue de 31.120 kilogramos de hoja verde (6.224 kilogramos de hoja verde por hectárea).
El manejo actual se orienta a lograr una producción de kilogramos de hoja verde por hectárea rentable y de buena calidad, mediante la incorporación plantas de yerba con buen estado fitosanitario (lo que redunda en plagas y enfermedades bajo umbral de daños económico, con limpieza de plantas enfermas e instalación de trampas) y, árboles nativos al sistema de forma adecuada y planificada; se prevé reposición en los cuadros con mortandad, corte rama madura, fertilización según producción por cuadros, y manejo eficaz de la cobertura y de suelo. En paralelo, el registro de todas las actividades realizadas en cada cuadro y un manejo integrado de todo el sistema en la chacra.
-“El SEY aporta competitividad al productor”
Si bien el propietario de la chacra es Luis Díaz Espeche, actualmente la administran sus hijos Rodrigo Luis Díaz Llorente y Hernando Luis Díaz Llorente. “Además de la cuestión productiva ya que ha mejorado la calidad y cantidad de hojas, valoramos el recambio generacional en la chacra, con estos jóvenes que optaron por dedicarse a cuidar y mejorar la yerba mate y le imprimen su impronta, con el cuidado ambiental, algo absolutamente necesario en los tiempos que corren”, señaló Dalcolmo. “Aquí tenemos a un padre que confió el manejo productivo a sus hijos, algo que no es sencillo ya que hay que tomar decisiones importantes y ellos lo hicieron, y están conformes”, prosiguió.
Hacklander, por su parte, ponderó el rol del programa del INYM en beneficio de los productores: “Son contundentes los resultados del cambio de prácticas en el yerbal, y esto nos demuestra la importancia del Servicio Técnico del INYM, no sólo porque de esta manera, con un manejo sustentable, recuperamos y cuidamos bienes esenciales como el suelo y el agua, sino también porque estamos dando competitividad al pequeño productor, y esto únicamente es posible si hay un programa como el que tiene el INYM, el SEY, de apoyo al sector productivo”.
El ing. Cristian Olivera, técnico del SEY, quien trabaja junto a unos 50 productores de la zona, destacó la visión integral de los Espeche como uno de los factores que determinan el éxito. “Notaron que el manejo tradicional no era redituable y optaron por atender la yerba mate como un sistema productivo, es decir como parte integral de toda la chacra, entendiendo que es preciso garantizar tanto la fertilidad del suelo como la presencia de insectos controladores de plagas, la provisión de agua, la reposición de nutrientes extraídos por la cosecha, y otras cuestiones, prevaleciendo un manejo sustentable”. También, continuó Olivera, “hacen un seguimiento continuo, permanente, de las acciones”.
-“Buen Productor Yerbatero”
El reconocimiento “Buen Productor Yerbatero” es otorgado por el INYM desde el año 2013 a quienes se destaquen por aplicar prácticas de manejo de plantas y suelo que contengan principios innovadores basados en condiciones de sustentabilidad, y que puedan servir de modelos productivos independientemente de la superficie, ubicación y nivel tecnológico o mecanización aplicada.
-Los productores distinguidos a la fecha son:
- 2013: Mateo Froehlich, de Ruiz de Montoya.
- 2014: Luis Lytwyn, de Tres Capones.
- 2015: Mariano José Kovach, de Colonia Liebig, y para Carlos Antonio Horoszczuk, Dos de Mayo.
- 2017: Ricardo Schmidt, de Leandro N Alem.
- 2018: Marcos Munaretto, de Campo Ramón.
- 2019: Luis Napoleón Bielakowicz, de Colonia Guaraní.
- 2020: Basilio Novosak, de Guaraní.
- 2021: Walter Wurfel, de Leandro N Alem.
- 2022: Trajano Vaccari, de Colonia Alicia Alta.
- 2023: Luis Héctor Díaz Espeche, de San Pedro.