La oposición no consiguió este miércoles 11 de septiembre, revertir el veto presidencial de Javier Milei a la nueva fórmula de movilidad jubilatoria en la Cámara de Diputados. La votación, que culminó con 153 votos a favor, 87 en contra y 8 abstenciones, mostró un resultado más holgado a favor del oficialismo, gracias al cambio de postura de una parte significativa de legisladores del bloque radical, que tras votar hace tres semanas a favor de la ley, esta vez lo hicieron en contra, al apoyar que el proyecto caiga.
Las primeras señales de la victoria libertaria se conocieron cuando cinco diputados de la UCR -el misionero Martín Arjol, Luis Picat, José Federico Tournier, Mariano Campero y Pablo Cervi- se fotografiaron junto al presidente en la Casa Rosada, dejando en claro que votarían en contra del proyecto que ellos mismos habían aprobado en junio.
A estas señales se sumaron las ausencias de Roxana Reyes, quien había anunciado que se abstendría, y Gerardo Cipolini. Esta situación causó tensiones dentro del bloque conducido por Rodrigo de Loredo, generando reproches, escraches públicos y amenazas de medidas disciplinarias contra los “radicales L”.
“Roma no paga traidores y el pueblo tampoco los vota”, arremetió la diputada Danya Tavela, en referencia a sus compañeros díscolos. Dado que el proyecto llegó al recinto sin dictamen de comisión, se necesitaba habilitar su tratamiento sobre tablas con dos tercios de los presentes, la misma mayoría agravada que se requería para su aprobación.
La habilitación se aprobó a mano alzada, incluso con el aval del oficialismo, que prefirió avanzar con la votación para evitar que el tema volviera a comisión y prolongara la discusión. Antes de que comenzara el debate formalmente, la Cámara aceptó la renuncia del radical entrerriano Pedro Galimberti, quien se desempeñará en la Comisión Técnica Mixta de Salto Grande. Fue reemplazado por Nancy Ballejos, del PRO, quien sumó otro voto en contra de la insistencia.
-Abstención de Innovación Federal
La ley sancionada hace tres semanas en el Senado establecía una actualización por IPC de las jubilaciones más un plus de 8,1% retroactivo a enero. También incluía el pago de las deudas de las cajas previsionales provinciales, el desembolso de todos los juicios previsionales con sentencia firme y un aumento anual adicional en marzo según la diferencia entre el índice Ripte y el IPC.
Desde el principio, Milei había adelantado que vetaría la ley debido a que implicaba un costo fiscal de 1,2 puntos del PBI, afectando el superávit fiscal, base de su programa económico. El bloque Innovación Federal, que había votado unánimemente a favor de la nueva fórmula en junio y presionó para incluir los pagos a las cajas previsionales provinciales, terminó optando por la abstención.
“Esa fórmula evitaba lo que ahora será inevitable: una catarata de juicios contra el Estado por no respetar el empalme de una fórmula y la otra. Son juicios que el Estado va a perder, es un mayor gasto futuro”, explicó el rionegrino Agustín Domingo. Y agregó: “No vamos a votar en contra de esa decisión política que tomó el presidente, pero tampoco vamos a convalidar. La posición de nuestro bloque va a ser la abstención”. La decisión de Innovación Federal de estar presentes favoreció al oficialismo, porque subió el umbral para llegar a los dos tercios de los presentes.
-La división en la UCR
Rodrigo de Loredo reconoció públicamente las tensiones internas que llevaron a su bloque a terminar con votos a favor, votos en contra, ausencias y abstenciones. Señaló que el Gobierno tenía la posibilidad de vetar parcialmente los artículos que representaran mayor gasto fiscal pero respetar la recomposición del 8,1% “tal como sus propios senadores dictaminaron en el Senado”.
“Cuando advertimos que el Gobierno está cerca de desbaratar los dos tercios, le decimos a los que quieren ayudar a los jubilados: ‘Insistamos parcialmente’. Y la respuesta fue: ‘No, todo o nada, y que se sepa de qué lado está cada uno’. Ni unos están discutiendo el superávit fiscal ni los otros están tratando de ayudar a los jubilados”, planteó de Loredo.
Finalmente, Germán Martínez, de Unión por la Patria, apuntó contra los radicales, acusándolos de hipócritas. “Estamos cansados de los que dicen que están a favor de los jubilados y terminan dándose vuelta como unos panqueques. ¿Qué hubo? Renuncias a último momento, fondos que aparecen, cargos en el gobierno nacional. Una votación se puede ganar o perder, lo que no se puede perder es la coherencia”, concluyó.
José Luis Espert, en un discurso enfervorizado, acusó a los kirchneristas de ser “chorros” y sentenció: “Ustedes se quejan de las jubilaciones de miseria, pero jubilaron a cuatro millones de personas sin aportes. ¿Qué creían que iba a pasar? El sistema iba a quebrar. A ustedes no les importan los jubilados, solo los quieren usar para quebrar la columna vertebral del programa económico del gobierno”.
-*Diputados radicales piden reordenar el bloque y repudian a cinco legisladores por apoyar el veto a la Ley Previsional*
En un comunicado dirigido al presidente del bloque radical en la Cámara de Diputados, Rodrigo de Loredo, un grupo de legisladores de la Unión Cívica Radical (UCR) expresó su malestar por la postura adoptada por cinco de sus compañeros de bancada, quienes, según denunciaron, rompieron un acuerdo unánime para respaldar el veto presidencial a la Ley Previsional.
El documento, firmado por un nutrido grupo de diputados del radicalismo, resalta la gravedad del hecho y su impacto en la credibilidad del partido ante la ciudadanía.
-Fuerte cordón de seguridad en las afueras del Congreso, aunque igualmente se produjeron desmanes y encontranasos entre manifestantes, jubilados, estudiantes y otros, con los agentes policiales
(Con información de: Infobae, Misiones Online y RMM)
