La convocatoria realizada por las Universidades públicas de todo el país, contó con la adhesión de y distintas organizaciones sociales, sindicales y políticas. En CABA, la marcha se inició en el Congreso y se concentró en Plaza de Mayo.
(foto EFE)
En medio de esta manifestación, que realmente alcanzó una masiva participación, se conoció la renuncia del número dos de Sandra Pettovello en la cartera nacional de Capital Humano
La marcha en rechazo al ajuste universitario propuesto por el gobierno de Javier Milei tuvo epicentro en la ciudad de Buenos Aires y comenzó a las 15:30 en el Congreso y desde allí los manifestantes se trasladaron hacia la Plaza de Mayo, bajo el lema “En defensa de la universidad pública y gratuita”. Hubo réplica en los principales distritos del país, en donde funcionan otras Universidades o extensiones de Altas Casad de Estudio, que son públicas.
Los voceros denuncian que están atravesando una situación acuciante debido al congelamiento de las partidas y el incremento de los gastos de funcionamiento. Para el 2024, el gobierno nacional destinó los mismos fondos que utilizó la administración anterior en 2023, pese a que la inflación de diciembre pasado a marzo, ya superó el 90%.
El ministerio de Seguridad de la Nación y la secretaria homóloga de la Ciudad de Buenos Aires trabajaron en conjunto en el operativo de seguridad que desplegaron para controlar la marcha federal universitaria. Patricia Bullrich, afirmó que «se implementó el protocolo».
Por su parte, en su habitual conferencia de prensa, el vocero de la presidencia, Manuel Adorni, había expresado la postura del Ejecutivo, «para nosotros el tema de la discusión presupuestaria, tanto con las universidades como con los hospitales, quedó saldada la semana pasada. Esa discusión está terminada».
Capital Humano había informado que el gobierno dispondrá de un incremento del 70% para los valores de marzo, que elevarán la asignación por gastos de funcionamiento a $10.075.851.995 mensuales. En paralelo, anunciaron el otorgamiento de otra suba del 70% que se girará en el mes de mayo. De esta manera, el presupuesto alcanzaría los $14.224.732.213 mensuales.
-Universidades advirtieron que atraviesan «un período crítico» por las políticas del Gobierno y reclamaron «más inversión»
Desde Plaza de Mayo, representantes de las universidades leyeron un documento de reivindicación a la educación superior pública y gratuita.
Docentes, estudiantes y representantes de distintas organizaciones encabezaron este martes una gran marcha universitaria nacional que tuvo como epicentro la Ciudad de Buenos Aires, donde se leyó un documento.
El texto, elaborado por el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), el máximo organismo que nuclea a los rectores de las universidades públicas nacionales, junto a la Federación Universitaria Argentina y el Frente Sindical de Universidades Nacionales, fue leído por Piera Fernández de Piccoli, presidenta de la FUA.
«Las universidades son uno de los motores de la democracia, la producción y los lazos sociales», señalaron y destacaron la importancia de que sea «pública, gratuita e irrestricta en el ingreso, de excelencia, con libertad y equidad. Somos la universidad pública para el gran pueblo argentino».
Pese a la importancia que tienen las casas de altos estudios, advirtieron que en los últimos meses «han sufrido un fuerte ajuste en términos reales en los gastos de funcionamiento», la partida que el Poder Ejecutivo envía mes a mes para que puedan pagar servicios, mantener los edificios, cubrir las becas, sostener la continuidad de los comedores o invertir en desarrollo y hospitales.
«Llegamos a marzo de 2024 con un presupuesto de gastos a valores de septiembre de 2022. El incremento del 70% de estas partidas, dispuesto para el mes de marzo, más el reciente anuncio, en el marco de esta convocatoria, de un 70% adicional, constituyen un aliciente aún insuficiente en tanto la inflación fue de un 300% en el mismo período de tiempo», manifestaron.
El documento expresó las fuertes críticas de las universidades al Gobierno por el recorte en las partidas, no solo en lo referido a los gastos de funcionamiento sino también para salarios. «Más del 90% de lo que el Estado invierte en educación superior, se destina al pago de salarios de los que trabajan como docentes y no docentes. En los últimos meses, el salario ha perdido el 50% respecto de la inflación», indicaron.
«Este deterioro se hermana con el resto de los sectores del mundo del trabajo», cuestionaron, y pidieron que «ningún trabajador o trabajadora esté por debajo de la línea de la pobreza».
Ante este esta situación, resaltaron la defensa «del acceso a la educación de las grandes mayorías». «No queremos que nos arrebaten nuestros sueños. Nuestro futuro no les pertenece. Somos orgullosos hijos e hijas de la universidad pública argentina», añadieron.
Sobre el final, aseguraron que «todos los problemas que tenemos se resuelven con más educación y universidad pública, con más inversión en ciencia y tecnología. Queremos que nuestras instituciones sean el dispositivo que le permitan a la Argentina desandar las desigualdades estructurales y emprender la senda del desarrollo y la soberanía. La educación nos salva y nos hace libres. Convocamos a la sociedad Argentina a defenderla».
Los organizadores señalaron que unas 800.000 personas se convocaron en Plaza de Mayo, donde se dio cierre a la marcha que comenzó en horas del mediodía en Facultad de Medicina y pasó frente al Congreso. También hubo masivas movilizaciones en Córdoba (Córdoba), Mendoza (Mendoza), Rosario (Santa Fe), Mar del Plata (Buenos Aires), entre otros distritos.
Previamente a la lectura del documento, Carlos De Feo, titular de CONADU, destacó la importancia de la movilización de esta tarde porque «la universidad pública es un derecho de los argentinos» y señaló que «los universitarios demostramos que vamos a estar con nuestro pueblo no solamente por la universidad sino para que el pueblo tenga derecho a un futuro mejor».
Sonia Alesso, titular de la Confederación de Trabajadores de la Educación (CTERA), resaltó que «defender la universidad pública es un honor«, mientras que Sergio Romero, de la Unión Docentes Argentinos (UDA), destacó que la educación pública argentina «es un reflejo del país« y que «debe ser un tema central de cualquier gobierno».
Daniel Ricci, secretario de la Federación de Docentes Universitarios (FEDUN), señaló que el acto «es de todos los argentinos« y le agradeció «a los rectores que conducen las universidades, a los estudiantes, a los docentes y no docentes, que día a día mantenemos la calidad de la que estamos orgullosos». Luego de destacar la presencia de representantes de todos los partidos políticos, afirmó que «todos defendemos la heterogeneidad de la universidad pública».
Más temprano, Taty Almeida, una de las referentes de Madres de Plaza de Mayo, aplaudió la masiva congregación de estudiantes y docentes en defensa de la universidad pública contra el recorte presupuestario del Gobierno y resaltó que «la única lucha que se pierde es la que se abandona». «No bajen los brazos«, dijo.
Luego, el premio nobel de la paz, Adolfo Pérez Esquivel, defendió «la universidad pública, libre y gratuita» dado que «es una de las grandes conquistas de nuestro pueblo, que no vamos a renunciar». «No hay plata para la educación, no hay plata para la salud, para los campesinos, pero hay plata para comprar aviones de combate que el país no necesita«, criticó y señaló que, «la educación es el presente y el futuro de la Patria« y agregó: «No vamos a renunciar a ello».
(Con información de M1, P12 y Á)