Se trata de un dispositivo que se coloca debajo de la piel y que ya le ha dado buenos resultados a figuras muy conocidas del ámbito social y artístico.
Las relaciones sexuales son un campo complejo para todos los seres humanos. La vitalidad después de cierta edad, el rendimiento en la intimidad y la necesidad de mantener la llama encendida son algunos de los temas que preocupan a muchos hombres y mujeres y, por esa razón, existe un chip sexual que, aparentemente, es la solución a todas nuestras intrigas.
Lo cierto es que, además de ser promocionado por diferentes figuras mediáticas como: Carmen Barbieri, Georgina Barbarossa, Dady Brieva, Ernestina Pais, Gladys la Bomba Tucumana, Mónica Farro, Osvaldo Sabatini y Sergio Goycochea, el chip sexual no es un producto más que se comercializa para luego desilusionar al comprador.
-«El chip es una alternativa de tratamiento para ciertas personas»
Señaló el sexólogo Héctor Sandoval, quien además explicó que existen dos enfoques complementarios en términos de calidad de vida y sexualidad: «Se sabe que con el paso del tiempo – desde los 40 años en adelante – uno se empieza a quedar sin hormonas, hormonas que son esenciales para la actividad del cerebro y la actitud. Entonces se va perdiendo esa actitud enérgica, de lucha. Se tiende a ser muy pensante a la hora de tomar decisiones. Aparece ese pensamiento recurrente, de rumiación, como se suele decir. Todo esto tiene que ver con la declinación hormonal que también afecta al metabolismo de los músculos, los huesos. Se van tornando más frágiles. El pelo y la piel pierden calidad«, refirió el especialista.
«En la esfera sexual, hay una caída progresiva del deseo, que en el hombre está muy vinculada al descenso de testosterona. En la mujer también sucede con los síntomas de la menopausia, pero en el hombre es más sustancial. Esta baja de testosterona el hombre la nota en su actitud en la vida general -ven que no rinden como antes- y, esencialmente, en el sexo», continuó
Y agregó: «La alternativa para ese tipo de pacientes es este chip que se coloca debajo de la piel para que segregue una medicación en forma diaria a lo largo de seis meses. Se trata de un implante muy chico que se llama pellets (pequeños comprimidos) con una droga biodéntica que se obtiene de las plantas. Tiene un tamaño de un granito de arroz y se insertan en la cintura. Hay diferentes dosis según la necesidad del paciente y dura de 4 a 6 meses para luego reabsorberse».
Además, el experto en sexología sostuvo que este implante «se puede usar de manera continua, dado que depende de cada persona y de la respuesta que le dé. En general, el que se lo pone y nota la diferencia, se lo vuelve a poner«, indicó.
-Efectos del chip sexual
Muchos son los pacientes que Sandoval ha atendido por diversas cuestiones sexuales y que acabaron insertando en su piel el dispositivo que puede cambiarlo todo. En este sentido, el especialista se refirió a los resultados que ha podido conocer: «Ha demostrado mejoras en el deseo sexual. Es un excelente refuerzo para lograr una erección firme y duradera y un incremento de la frecuencia e intensidad del orgasmo».
Sin embargo, el experto realizó la siguiente salvedad: «Si tenés una dificultad en la erección que viene desde hace diez años, por ejemplo, el chip no te va a resolver eso porque ese tejido seguramente esté francamente enfermo. El chip ahí no te va a aportar mucho, es para casos puntuales».
«El implante también da más energía, otorga sensación de bienestar general. Mejora el humor, la memoria y las capacidades cognitivas. Favorece el desarrollo y mantenimiento de la masa muscular. Recupera la vitalidad de la piel y el cabello. Regula y mejora el metabolismo del azúcar y grasas. Además, previene la arteriosclerosis y, en la mujer, mejora los sofocos en la menopausia», puntualizó respecto a los efectos que tiene el implante por fuera del ámbito sexual.
-Contraindicaciones:
Al respecto, Sandoval comentó: «Si tenés algún tipo de cáncer, una enfermedad pulmonar grave o cardíaca avanzada, o cualquier patología severa, no te podés poner un chip, no sería conveniente. Pero no es lo más frecuente en las consultas que recibo. Quien está atravesando una enfermedad, no está pensando en ponerse un chip».
Cabe destacar que este novedoso método para mejorar el rendimiento sexual, ha sido repudiado por un grupo de médicos que argumentan la falta de aval científico y de aprobación por parte de organismos regulatorios como, por ejemplo, la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT).
-Costo de mercado:
Además, es verdaderamente oneroso: para las mujeres, el chip cuesta alrededor de 100.000 pesos, mientras que para los hombres el precio es de 160.000. A pesar de eso, Sandoval indicó que «el producto se vende solo», debido a sus excelentes resultados comprobados.
(Fuente: M1)